Las Misteriosas Naves Aéreas del Siglo XIX

Prologo

Durante las últimas décadas del siglo xix  y primeras décadas del siglo xx, una serie de extraños avistamientos sobre los cielos comenzaron a ser noticia alrededor del planeta. Siendo Las Américas el epicentro durante el siglo el xix y durante las primeras décadas del siglo xx Europa.

Estos extraños avistamientos se referían a maquinas aéreas: maquinas tripuladas, maquinas que causaban gran consternación a las personas que las avistaban o tenían algún encuentro con ellas; y más aun, cuando estos encuentros eran con sus tripulantes. Todas las acciones de aquellas naves aéreas son similares a las acciones de los ovnis de hoy; con sus respectivas faces de contacto: primera, segunda y tercera fase. Aunque no se habla de algún encuentro cercano de la cuarta fase, durante estos encuentros con estas naves aéreas; si hubo un incidente que fue reportado y del cual hablaremos más adelante.

La multitud apreciando una de las naves aereas. Sacramento 1896 (Imagen. de.wikipedia.org)

Hacia la Conquista del Aire

La conquista del aire comenzó cuando los hombres desearon volar, al ver las aves y envidiarlas. Ya en el renacimiento Leonardo da Vinci nos enseñaba sus esquemas; eran sus intentos de entender cómo se haría para volar; podemos ver sus dibujos de aves, alas, y su helicóptero, que hasta donde sabemos jamás fue construido. Mas tarde, en el siglo xviii, los hermanos Montgolfier con su globo de aire caliente, al fin, despegarían nuestros pies de la tierra el 14 de diciembre de 1782. Difíciles de dirigir y mantenerles sustentados en vuelo, no se cesó en la búsqueda de una opción mejor. A fines del siglo xix, los planeadores de Otto Lilienthal, mostraban una alternativa diferente del globo; un artilugio más pesado que el aire, si se podría inventar. Hasta que los hermanos Wright en 1903, inventaron el primer avión. Siendo una maquina más pesada que el aire, logró volar. Y los aviones, siguieron volando sin poder hacerlo; según las academias de las ciencias que afirmaban que una maquina más pesada que el aire nunca volaría. Así comenzó la era actual de la aviación y nuestro dominio de los cielos. Para que en 1969, alcanzáramos la luna, demostrando así un supuesto dominio del aire.

Globo Aerostático (Imagen. lhommenaif)

Planeador de Otto Lilienthal (Imagen. johnelkington)

Primer vuelo hermanos wright (Imagen. biografiasyvidas)

Los Avistamientos de 1896 y 1897 en EE UU

No parece que nosotros hubiéramos sido los primeros en volar, ¿por qué?, en el siglo xix, por todo el continente americano, una serie de avistamientos fueron comentados y muchos de ellos publicados en la prensa; desde Chile hasta Canadá, naves capaces de permanecer estáticas, que surcaban impunemente los cielos, desplazándose a diferentes velocidades; sin que nada o nadie pudieran detenerlas, o saber a ciencia cierta ¿Qué eran? ¿Por qué estaban allí? ¿Cómo volaban? y ¿Quién o quiénes las pilotaban?

Sobre los cielos de los Estados Unidos los avistamientos tuvieron su mayor auge, en los años 1896 y 1897, una seria de artilugios volantes indiscutiblemente mecánicos; que algunas veces mientras volaban “parecían presentar problemas” citaba una de los periódicos que publicó la noticia, siendo argumentado esto “por una disminución de su velocidad promedio y algunas veces acompañado de extraños ruidos  y humo”.

 

Titular de periodico (Imagen. de.wikipedia.org)

Los contactos

Aunque hay reportes de avistamientos a todo lo largo de Las Américas, es en los Estados Unidos; al parecer, donde los ocupantes de estas insólitas naves aéreas decidieron establecer contacto. Los reportes de estos avistamientos son extensos y hay múltiples casos. Solo relataremos a groso modo, algunos de ellos. En otra publicación hablaremos de cada uno de los casos de los que tenemos información.

Las naves aéreas se desenvolvían de una manera extraña: permanecían estáticas, se desplazaban lentamente; algunas veces dando círculos, y en las noches, barrían la campiña con poderosas luces, asustando a los desprevenidos paseantes, que se veían sorprendidos cuando estas luces los impactaban de lleno. Los reportes afirman que cuando estas naves aéreas estaban cerca del suelo, se oían voces que provenían del aparato: alguien dando órdenes, corrigiendo el rumbo o advirtiendo de peligros para la navegación de la nave. Otros reportes afirman que no solo las naves emitían ruido de maquinaria, sino que también se podía escuchar que de ellas provenía música. Así mismo atestiguaban que algunas veces se veía a sus ocupantes observando desde aberturas en el aparato. Hasta incluso, ciertas cosas que podrían resultar cómicas, por ejemplo: unos cuantos sostenían que se veían personas colgando del aparato, haciendo lo que podría parecer “pedaleando” ósea, como quien dice, la nave aérea era en efecto una maquina impulsada por fuerza física corporal. Incluso, estas naves aéreas no estaban exentas de accidentes: roses con estructuras, arboles e incidentes con anclas que bajaban de ellas y se enredaban en construcciones o cercas.

Cuando las naves aéreas descendían y los testigos inesperadamente las sorprendían en su lugar de aterrizaje, éstos decían haber visto criaturas descender de ellas. Algunos relatos afirman que estas criaturas eran repulsivas; “no parecían ser habitantes de este mundo”. Comparándolas con lo que ya muchos afirmaban en aquel entonces “son habitantes del planeta Marte”. En cambio, cuando los tripulantes de la nave aérea no eran sorprendidos y querían tener algún tipo de contacto; mostrándose al testigo y hablándole; en estos casos los tripulantes eran formalmente humanos, sin ninguna diferencia del habitante típico e independiente de los EE.UU. Aunque muchas veces, a pesar de su forma física humana, decían provenir del planeta Marte. También los testigos relataban, que los tripulantes decían ser terrícolas, que estaban llevando a cabo un experimento aeronáutico con nuevos materiales, y que pronto se darían a conocer esos nuevos adelantos tecnológicos. En otras ocasiones, estos insólitos tripulantes decían que esas naves eran ensayos para establecer un servicio de transporte intercontinental,  entre Asia y América. También estos tripulantes algunas veces afirmaban ser turistas y que querían aprovechar el momento para ver el paisaje y disfrutar de las atracciones del lugar. También, los tripulantes alegaban estar haciendo reparaciones a la nave, eso decían a los lugareños que se topaban con ellos y como si no fuera poco, éstos les pedían favores; como de ir a comprarles implementos o ciertos químicos que necesitaban para poder reparar la nave. Cuando el testigo accedía a hacer el favor, inmediatamente el tripulante sacaba unos dólares y se los estregaba a éste y le decía “quédese con el cambio; por lo de la molestia”.

En el estado de California, EE.UU. el coronel H. G. Shaw, alegó, que mientras el conducía su bugí a través del campo, cerca de Stockton, se encontró con lo que parecía ser una nave espacial que había aterrizado. Los tripulantes de esta nave se acercaron al capitán, examinaron el bugí, entonces trataron de conducirlo físicamente hacia la nave aérea. Los tripulantes, al darse cuenta que no tenían la fuerza física para llevárselo, cesaron en su empeño. Luego los tripulantes regresaron a la nave, esta despego y acelero a una velocidad increíble, hasta perderse en el horizonte. Este ha sido el primer relato donde se observa “el primer intento de abducción por parte de estos tripulantes a seres humanos”.





 La nave aerea 1896 (Imagen. de.wikipedia.org)




Nave aerea. Sacramento 1896(Imagen. de.wikipedia.org)






Un explorador de Marte. Sacramento 1897 (Imagen: de.wikipedia.org)





Avistamiento de McCann. chicago 1897(Imagen. de.wikipedia.org)

Las Naves Aéreas de Julio Verne

Durante los avistamientos en América y antes de las oleadas de 1896 1897, Julio Verne  publicaría En 1886 una de sus novelas de ciencia ficción titulada “Rubor el Conquistador” (Robur-le-Conquérant) es una historia de un científico llamado Rudor, él cual, inventa una maquina que podía volar a pesar de ser mas pasada que el aire. Este ingenio era similar a un barco, su cuerpo era metálico y se propulsada con hélices, tanto vertical como horizontalmente. Gracias a esta maquina a la cual se le llamaba  Albatros, Rudor podía surcar los cielos impunemente. Y a causa de sus vuelos, había numerosos reportes de testigos, que afirmaban ver extrañas luces y sonidos en los cielos del mundo.

Esta historia guarda gran similitud o al menos hasta donde podemos indagar, con las oleadas de avistamientos de las naves aéreas. Julio Verne acá, una vez más nos demuestra adelantarse en la historia y en los acontecimientos. ¿Sería un vaticinio de lo que pasaría? ¿o será acaso que estos creadores de estas naves aéreas se inspiraron en los relatos de Julio Verne para crear estas obras teatrales?.

El fabuloso mundode jules Verne. Karel Zeman 1958 (Imagen: www.jverne.net)

Fotografia de modelo (Imagen. freewebs.com) 

Conclusiones

Los avistamientos de las naves aéreas y las acciones de éstas, tanto como de sus tripulantes, son similares en cuanto a lo que pasa en la actualidad con el fenómeno OVNI. Solo que al escuchar estos relatos de los avistamientos del siglo xix y de los encuentros con los tripulantes de estas naves aéreas, se nos hacen estas historias mas insólitas y teatrales que la de los relatos de encuentros y avistamientos del fenómeno ovni hoy.

Cuando los seres humanos se encontraban con estos seres sin que ellos advirtieran, los testigos solían decir que estos seres no parecían habitantes de este mundo. A diferencia cuando sus naves aterrizaban cerca de un poblado y buscaban contacto  generándolo, los testigos afirmaban que estos seres eran iguales a nosotros, y en la mayoría de veces, hablaban la lengua del contactado sin acento.

Estos seres suelen camuflar el aspecto de sus maquinas o vehículos con los nuestros, generando una mera fachada, tras la cual se debe de esconder la increíble tecnología de las que estas naves están provistas. En aquel entonces (siglo xix) se conocía como medio de propulsión, para maquinas voladoras y acuáticas la hélice, y los elementos de nuestras naves aéreas en un principio eran más expuestos de lo que son hoy. Ahora nuestras naves aéreas están remplazando las hélices con turbinas y muchas veces estas turbinas están dentro del fuselaje, por lo que su aspecto es más limpio y no suelen ser tan toscas sus apariencias como las de antes, sin estar compuestas de varias partes, sino siendo una sola masa; esto mismo pasa con la morfología que nos muestran las naves aéreas misteriosas de ayer y de hoy.

El paradigma del siglo xix era que en Marte había vida y existían seres como nosotros. Durante los avistamientos y encuentros con estos seres, ellos solían decir que procedían precisamente de Marte. En la actualidad con el avance de la ciencia y la astronomía, se dice que en nuestro sistema solar el único lugar que puede albergar vida es  La Tierra. Así que el paradigma actual de nuestra ciencia, es aseverar que la vida se encuentra fuera de nuestro sistema solar, y ahora en la actualidad estos seres afirman provenir de diferentes partes del universo.



Juan López